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Todo lo que debes saber sobre el cultivo hidropónico en casa

Cultivo hidropónico en casa
Como dice su nombre, un cultivo hidropónico se conoce como el método de cultivar plantas por medio del uso de agua en vez del tradicional uso de suelo agrícola. Con este procedimiento lo más importante es depositar en el agua los nutrientes necesarios para que la planta crezca sin inconvenientes. De esa forma, la raíz de las plantas absorberá la solución nutritiva por lo que no se necesita la tierra para que se desarrolle.

Este tipo de cultivo se ha convertido, con los años, en una de las opciones más eficientes y con ventajas ambientales para cultivar plantas comestibles y flores. Esto se debe al reemplazo de la tierra con fibras de coco, zeolita, arcilla expandida o lana de roca; recursos que permiten que los agricultores de países con condiciones difíciles para el cultivo tradicional puedan obtener una producción de vegetales ricos en elementos nutricionales.

¿Qué es el cultivo hidropónico?

Cuando hablamos de cultivo hidropónico, nos estamos refiriendo a una técnica empleada para cultivar plantas comestibles y ornamentales sin necesidad de usar el suelo o tierra. A través de esta técnica que emplea disoluciones minerales con nutrientes y agua, esenciales para lograr el desarrollo y productividad de las plantas.

¿Cómo funcionan los cultivos hidropónicos en casa?

Bien sea en tu hogar o en alguna granja hidropónica, el funcionamiento de estos huertos con agua dependerá del sistema que se implemente. Lo más común es contar con un soporte que no se mueva del lugar donde se tendrá la planta junto con una solución nutritiva que se pondrá en el agua.

Esta solución con nutrientes se puede implementar de forma estática o circulante y siempre debe contar con un pH con tendencia a neutro (pH 7).

Por otra parte, es necesario que las plantas cuenten con una buena oxigenación y estén a una temperatura menor a los 28 °C. Por esta razón es importante que se encuentren en un invernadero hidropónico adecuado, en caso de querer tenerlo en el hogar.

A su vez, existen dos tipos de sistemas de hidroponía básica que puedes implementar en tu huerto, estas son: el cultivo en agua, también conocido como raíz flotante y el cultivo en sustrato inerte, que solo aporta estabilidad y retención de agua a las plantas.

En el primero las plantas se disponen de modo que floten sobre la solución de nutrientes, en el segundo sistema puedes emplear materiales de soporte como la fibra de coco o la arena y la solución se emplea por irrigación.

¿Para qué sirve tener huertos hidropónicos?

Contar con un cultivo hidropónico te servirá para producir diferentes plantas, tanto alimenticias como medicinales y ornamentales. Su mayor beneficio es que no debes disponer de un suelo adecuado para agricultura, por lo que puedes hacerlo en tu hogar y sin temor a que tus alimentos presenten enfermedades que se asocian al suelo y que pueden hacer que pierdas tu cultivo.

Huerto hidropónico

Este tipo de cultivos con agua resultan más eficientes debido al control de agua y los nutrientes necesarios para que tus plantas crezcan sanas. Lo mejor de la hidroponía casera es que te permite aprovechar todos los nutrientes fácilmente porque el excedente de solución nutritiva lo puedes reutilizar.

Todo esto permite usar métodos hidropónicos en casi cualquier área donde vivas, bien sea rural urbana. Además, cuenta con un mayor rendimiento debido a la eficiencia en el uso de todos los recursos implementados, lo que se traduce en mayor productividad de plantas.

¿Quieres hacer tu propio cultivo hidropónico en casa? Conoce cuatro diseños

Antes de crear el huerto a base de agua, es necesario definir el espacio que dispones para su elaboración. El espacio será el que defina el tipo de diseño de huerto más conveniente para ti. Ten en cuenta que el lugar que selecciones debe permitir que el huerto reciba por lo menos 6 horas de luz solar diaria.

Una vez que tengas el lugar, piensa en tu proyecto de invernadero hidropónico antes de poner manos a la obra. Este deberá contar con un suministro de agua constante y debe tener una cubierta plástica transparente que servirá como techo para cubrir tu huerto de la lluvia en caso de estar al aire libre.

Cultivo hidropónico en botella de plástico

Si deseas crear un sistema de hidroponía vertical podrás llevar tu huerto al interior de la casa, siempre y cuando el espacio cuente con el sol necesario para que todo salga bien. Ahora, debes pensar en la solución nutritiva para tu huerto en casa. Lo más práctico será utilizar fertilizantes líquidos orgánicos como el humus líquido de lombriz. Dicho esto, a continuación, te presentamos cuatro diseños de huertos hidropónicos en casa:

1- Almácigo y trasplante

Ya tienes el espacio y la solución nutritiva lista, pero faltan las estrellas del huerto: las plantas. El almácigo es el espacio planeado que proveerá a las plantas las condiciones ideales para su germinación. Esto permite que se encuentren en óptimas condiciones antes de ser trasplantadas a tu huerta hidropónica.

Ten presente que existen algunas especies de cultivo que necesitan una fase de almácigo y trasplante como es la lechuga, el tomate y la cebolla larga. Para hacer el huerto hidropónico de almácigo deberás poner en algunas bandejas de 2 a 3 cm de profundidad un poco de sustrato inerte de manera uniforme.

Luego, realiza varios surcos para poner las semillas a la distancia que necesite cada una y luego tapa nuevamente las semillas. La idea es que tanto el sustrato como la semilla entren en contacto para comenzar el riego, transcurridos entre 15 a 30 días desde la germinación, según la planta que sea, deberás disminuir la frecuencia de riego. Esto se hace con el fin de prepararlas para condiciones más difíciles que vienen con el trasplante.

Una vez pasen entre 20 y 40 días, dependiendo del tipo de planta que hayas sembrado, ya podrás trasplantarla. Para que todo surja bien lo recomendable es que selecciones para el trasplante aquellas que se vean más fuertes.

2- Huerta en bandeja y mesa

Para este huerto necesitas una mesa rectangular de madera o plástico que se adecúe al espacio que has seleccionado previamente. Sobre ella dispón varias jardineras plásticas con drenaje y su respectiva bandeja de recolección, puedes usar otro tipo de recipientes siempre que tenga entre 15 y 20 cm de profundidad. 

Huerto hidropónico de transplante

Agrega a continuación sustrato inerte en el cual deberás trasplantar o sembrar según sea la planta que quiera cultivar. Para el trasplante realiza un agujero en el sustrato del mismo tamaño de la raíz, ten cuidado de que el cuello de la planta quede medio centímetro por debajo del sustrato. Para la siembra directa, pon la semilla al doble de su longitud en profundidad.

Ahora, aplica diariamente la solución nutritiva, esta debe humedecer el sustrato hasta que drene el exceso en la parte inferior. Recupera el excedente y reutilízalo para futuros riegos, ten presente que, al ser un huerto hidropónico pequeño, el control de plagas tendrás que realizarlo periódicamente y de forma manual.

3- Huerta hidropónica con tubos de PVC en soportes verticales

Este tipo de diseño de huerto es ideal si piensas realizar el cultivo de trasplante, para eso necesitas tubos de PCV con perforaciones. Sus agujeros deben estar a una distancia equivalente entre sí, ligeramente inclinados similar a una flauta. Rellena estos tubos con fibra de coco y en cada orificio trasplanta una plántula y riégala con la solución nutritiva.

Huerto hidropónico de PVC

Agrega un recipiente a la parte inferior del tubo para que puedas recuperar el excedente de la solución nutritiva. Esta es una excelente opción para las personas que disponen de poco espacio en sus hogares.

4- Cultivo hidropónico con raíz flotante

Este tipo de huerto funciona para cultivos de trasplante y, si bien, tiene más pasos que los anteriores, es un poco difícil de realizar. Necesitarás una bandeja de 15 cm de profundidad. A su vez, necesitas de una lámina de poliestireno expandido (unicel o icopor ) de 2,5 cm de grosor que debe ser de la misma forma de la bandeja, pero con 2 cm menos en cada uno de sus lados.

A esta lámina tendrás que hacerle perforaciones circulares de 2,5 cm que deben separarse entre sí a la distancia de siembra que se requiera. Por ejemplo, el cultivo de lechuga hidropónica de raíz flotante es uno de los más comunes de hacer y para esto las perforaciones deben estar separadas entre sí por 17 cm de distancia, aproximadamente.

Ahora, llena la bandeja con solución nutritiva y pon sobre ella la lámina con una planta en cada agujero, que las raíces floten en la solución de agua. De esta manera la lámina actúa como tapa que restringe el paso de la luz a la solución nutritiva. Así se impide el crecimiento de algas, sin embargo, tendrás que instalar un sistema de bombeo a esta agua.

Las bombas de acuario funcionan bien para este tipo de cultivos, ya que es necesario garantizar la buena oxigenación de la solución. De esta forma podrás tener tu propia huerta hidropónica en casa y disfrutar de todas las plantas comestibles, ornamentales y medicinales que producirás.

Ventajas de las huertas hidropónicas

  • Es una técnica sencilla de realizar, limpia y productiva para cultivar tus propios alimentos.
  • No necesitas gran cantidad de agua para que funcione, lo que supone menos con sumo de agua y aporta al cuidado ambiental. (Enlazar a artículo sobre cuidado ambiente)
  • Su uso limita la pérdida de biodiversidad terrestre debido a que se cambian grandes extensiones de tierra agrícola por entornos sostenibles y naturales(Enlazar a artículo sobre la economía sustentable y ecología) 
  • Se controla la cantidad de fertilizante utilizado, esto resulta beneficioso debido a que el abuso de fertilizantes genera una gran cantidad de nitratos que se suelen encontrar en los suelos utilizados para la agricultura y ganadería y resultan nocivos para el medio ambiente y la salud humana.

Para finalizar, el uso de cultivos hidropónicos no solo sirve para generar una máxima producción y calidad de plantas con un mínimo de espacio sin importar la época del año, sino también, contribuye con el cuidado del agua y el medio ambiente, sobre todo en las ciudades o sectores muy poblados.